Tras un parón navideño, Planeta deAgostini Comics lanza al mercado el tercer tomo del manga que sirve como precuela de Resident Evil 6, llegando a la mitad de la historia acontecida en Marhawa School.

Al comienzo del tomo, encontramos un extenso resumen de lo acontecido en los dos anteriores tomos, lo que se agradece tras este largo parón del tomo anterior a este. Ricky ha descubierto un BOW junto a Kapoor y Doug, y comienza la lucha contra él.

Tras acabar la lucha, todo el colegio se sumerge en la pandemia y comienza un brote por todas partes, Raccoon City de nuevo, los supervivientes han de combatir contra los zombies para esconderse y escapar.

Durante los hechos de este tomo, se desvelarán algunos de los misterios del brote y sorprenderá al lector los giros en la historia que acontecen.

De nuevo, el protagonista principal es Ricky, dejando a Chris y compañía relegados a una pequeña escena.

En este tomo aparece un nuevo personaje importante en la historia:

Nanan Yoshihara: Amiga de Bindi que murió hace unos meses en un intento de escapar de la escuela.

El dibujo continúa en la misma línea, muy adulto con sangre, disparos a la cabeza, mutilaciones… Un tomo muy gore por la cantidad de zombies que aparecen y sus víctimas. Un acierto utilizar páginas negras para separar las partes de recuerdos de las del presente. Como en los dos anteriores tomos, el prólogo es a todo color pudiendo apreciar cómo es la BOW contra la que se combate al principio del tomo, aunque muy escueto, tan sólo tres páginas.

El tercer tomo de esta serie de Resident Evil nos recordará a lo que pasan los protagonistas de otras historias de la saga en ambientes cerrados, Mansión de Spencer, Raccoon City, Isla Rockfort, tras un brote incontrolado de zombies. Los misterios seguirán ahí, pero la trama dará un giro muy importante. El survival y lo gore caracterizan esta entrega.